Croissant rellenos de muselina de ibericos

La historia del cruasán es una leyenda histórica y nace como uno de los actos festivos al salvarse Austria de una invasión otomana a finales del siglo XVII.

Los turcos otomanos habían adoptado el símbolo de la medialuna (que luego ha pasado a ser un emblema musulmán) al conquistar Constantinopla en 1453, la cual tenia como uno de sus emblemas una medialuna; que se originó en la Antigüedad precristiana cuando Constantinopla era una colonia griega llamada Bizancio.

Durante varios intentos de asalto, poco exitosos, contra los vieneses los turcos decidieron atacarlos por sorpresa con una nueva estrategia. Pensaron en socavar el terreno y así evitar las murallas pero actuando sólo de noche.

Los panaderos, que trabajaban a esas horas se dieron cuenta de la amenaza una noche y dieron la alarma de tal manera que al final fueron los defensores los que tomaron por sorpresa a las tropas musulmanas obligándoles a levantar el sitio.

Se dice entonces que los panaderos, como agradecimiento elaboraron dos panes: uno con el nombre de "emperador" y otro Halbmond, en alemán: "media luna", el actual croissant, como mofa de los turcos otomanos.

Luego elaborarían otros tipos de cruasán, conservando la forma como el Vanillekipferl, un croissant aromatizado a la vainilla, el Mandelbögen aunque más pequeño pero aromatizado a la almendra, el Mohnbeugel a base de una pasta rica en semilla de amapola, o el Nussbeugel con pasta con nueces y miel.

Los croissant pequeñitos de pasteleria son deliciosos, los puedes rellenar de cualquier cosa, a mí particularmente me gustan con queso y muselina de ibericos pero se pueden hacer millones de convinaciones, vetales, carnivoros, jejeje, con setas... todo es cuestión de imaginación. Aquí va mi receta espero que os guste!

Ingredientes:

8 croissant
200 gr Unas puntas de jamón
100 gr de chorizo*
3/4 tarrina de queso untable cremoso

* Sirve cualquier tipo de iberico lomo, cecina...




Desarrollo:


Se pica en trocitos pequeños de medio cm más o menos, el jamon y el chorizo.
Se echan en un bol y poco a poco se va añadiendo la tarrina de queso untable mientras removemos, hasta que este todos los ibericos cubiertos.

Más tarde se abren los croissant por la mitad y se les echa esta mezcla.

Por último se colocan en el plato y a comer!